Si llevas toda tu vida haciendo dieta, te habrás dado cuenta de que el éxito de pende de si eres capaz de cambiar tus hábitos alimentarios y meter zapatilla en tu día a día, o sea hacer ejercicio.
El coaching nutricional ayuda a que las personas identifiquen y venzan sus obstáculos, crea un entorno adecuado y adopta la actitud y determinación necesarias para conseguir el cambio en la alimentación, logrando al mismo tiempo mejorar otros aspectos de la misma y de su estilo de vida.
La novedad de este sistema es que un profesional te acompaña en la andadura; no sólo te aporta un plan de alimentación sino que tiene en cuenta tu realidad, tus barreras internas y externas y te hace partícipe a la hora de tomar soluciones. Tu eres el centro de todo, tu eres el protagonista y responsable de tu dieta.
Lo importante no es sólo saber como tengo que alimentarme sino tomar las riendas de mi vida y llevarlas a la práctica.
El profesional es el experto en salud, y tu eres el experto en tu propia vida. Juntos formáis un tándem perfecto para trazar el plan que te lleve a conseguir los resultados deseados.
La idea es que con el coaching nutricional la persona tenga el apoyo necesario para lograr la disposición y la motivación para el cambio y lograr el objetivo. Para lograr este cambio se necesita que la persona entienda lo que significa estar sano y feliz con uno mismo y como se relacionan sus hábitos de vida con sus valores, creencias y motivaciones.
El coaching nutricional consigue buenos resultados porque actúa en varios niveles:
- Venciendo la resistencia al cambio
- Favorece la toma de conciencia de sus hábitos.
- Planifica acciones
- Resuelve obstáculos del camino
- Da apoyo emocional